Los datos de junio muestran que el consumo en los hogares sigue desplomándose, incluso en comparación con el mismo mes del año pasado, cuando la caída ya había sido histórica. Si bien la baja interanual fue “solo” del 0,8%, el dato no trae alivio: el consumo sigue estancado en niveles muy bajos.
El rubro de consumo básico —alimentos, bebidas, higiene, limpieza— registró una caída del 2,4% respecto a junio de 2024. En ese entonces, ya se había derrumbado casi 13% en relación a 2023.
El modelo económico de Javier Milei no da señales de recuperación en el bolsillo: con salarios congelados, inflación acumulada y pérdida de empleo, ni siquiera los productos esenciales logran repuntar. Los números muestran que ni comparándose consigo mismo, el gobierno logra mostrar mejoras.