El lanzamiento de $Libra reúne todos los elementos necesarios para ser considerado una estafa coordinada mediante la utilización de un activo digital. El rol del mandatario argentino resultó central, en tanto nadie conocía el proyecto hasta que fue anunciado por el presidente en primera persona.

El escenario político y económico argentino se vio sacudido el fin de semana por un cisne negro: en uno de sus asiduos posteos en la red X (ex Twitter), el presidente Javier Milei recomendó invertir en $Libra, una criptomoneda desconocida, la cuál en pocas horas terminó resultando una estafa.

En medio del desconcierto que generó la noticia durante el fin de semana, las implicancias económicas políticas y judiciales de la misma, son capítulos desconocidos que todavía están escribiéndose. Propios y extraños todavía se preguntan cómo es que el mandatario terminó involucrándose en primera persona en un escándalo semejante, con alcance global. En ese marco existen al menos dos certezas.

1) El lanzamiento global de $Libra reúne todos los elementos necesarios para ser catalogado de estafa. En el segundo exacto en que Javier Milei le contó al mundo sobre la existencia de $Libra, y en el segundo posterior, se registraron compras millonarias del criptoactivo. Es evidente que había insiders con información privilegiada listos para comprar de forma coordinada y hacer subir la cotización rápidamente.

A ello hay que agregar que los creadores de $Libra se reservaron para sí mismos el 80% de las tenencias previas del criptoactivo (lo usual es que se reserven entre el 10% y el 15%). Eso es lo que les permitió realizar la venta masiva y posterior toma de ganancias, que terminó derrumbando la cotización en un par de horas.

La credibilidad de Javier Milei fue determinante en el éxito de la estafa detrás de $Libra. Nadie conocía acerca de ese criptoactivo hasta que el presidente lo promocionó, lo cuál lo convierte en partícipe necesario de la operación.

En pocas palabras, un puñado de personas sabía de antemano que el presidente iba a lanzar el criptoactivo, son los mismos que influyeron para que el precio suba, y los mismos que se beneficiaron con el derrumbe.

Que el lanzamiento se haya realizado un día viernes luego del cierre de los mercados financieros, y en un fin de semana que incluye lunes feriado en los Estados Unidos, también abona la hipótesis de que existió un trabajo de coordinación previa que incluyó la creación de la plataforma «Viva la Libertad Proyect» el mismo viernes por la mañana, el anuncio de Javier Milei, y la operatoria que terminó generando ganancias por unos u$s 87 millones a solo 9 perfiles inversores.

2) El presidente Javier Milei es partícipe necesario de la estafa cripto con $Libra. Nadie conocía acerca del proyecto hasta que él lo promocionó en primera persona. En su posteo, el mandatario colocó el acceso cifrado al contrato cripto, lo cuál hace las veces de «CBU», habilitando a los inversores a colocar sus fondos mediante las billeteras virtuales. Hasta que más tarde algunas de las exchanges decidieron incorporar $Libra como opción, no había forma de acceder a la cripto si no era a través del contrato que publicó Milei en su perfil.

Un dato no menor, es que el presidente hizo la recomendación con un «tweet fijado», lo que demuestra su interés en que todo el que ingresara a su perfil en X, leyera acerca del lanzamiento de $Libra. El hecho de que sea el presidente quien recomiende la inversión, es un detalle central.

Otro dato que reviste importancia, es la forma en que el mandatario presentó el proyecto. No lo hizo como una oportunidad de inversión financiera, sino como una iniciativa privada dedicada a «incentivar el crecimiento de la economía argentina, fondeando pequeñas empresas y emprendimientos argentinos». La frase da a entender un anclaje en la economía real, promovido por el presidente de la Nación, que además es economista y autoproclamado candidato al Premio Nobel de economía.

La credibilidad que reviste la figura de Javier Milei, es determinante en la confianza del inversor que se atreve a colocar fondos en un activo desconocido hasta ese momento. Incluso los principales traders digitales y los influencers del mundo cripto, dialogaban entre sí en las redes el viernes consultando de qué se trataba la moneda que recomendaba Milei.

Dicho de otra forma, la estafa no hubiese podido materializarse sin la intervención directa de Javier Milei, en tanto miles de inversores decidieron apostar por $Libra por la recomendación del mandatario. Sin el tweet del presidente, nadie hubiese aceptado colocar fondos en un activo desconocido y sin respaldo.

El primer interrogante es el timimg: el escándalo se desató al día siguiente del mejor dato mensual de inflación en cuatro años. El segundo, es si el presidente queda ubicado en el lugar del ignoto que fue usado para la estafa, o si estaba al tanto de la coordinación de la operación.

Con esas dos certezas, se abre un sinnúmero de preguntas. La primera es por qué razón Javier Milei decidió ponerle el cuerpo al lanzamiento de una criptomoneda, al día siguiente del mejor dato mensual de inflación en cuatro años, siendo la lucha contra la inflación el leit motiv de toda su gestión de gobierno.

La segunda es si el presidente fue utilizado por los estafadores para generar confianza en los inversores, sin tener idea de sus intenciones, o si el presidente estaba al tanto de la coordinación con que operaron los estafadores y pese a ello decidió ser parte. Ambas opciones son pésimas en términos políticos: quedar públicamente como un estúpido o ser etiquetado de lisa y llanamente de estafador.

By Brian

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *