En pleno inicio de año, se confirmó el cierre definitivo de la fábrica de calzado DASS, ubicada en Coronel Suárez, provincia de Buenos Aires. La planta, que cesará operaciones el próximo 20 de enero de 2025, deja a más de 400 empleados despedidos, quienes recibieron la noticia a través de telegramas enviados durante sus vacaciones, dejando en claro el insensible avance del Gobierno de Javier Milei.
Esta no es la primera empresa que anuncia el cierre de sus operaciones o de una planta, también lo hizo en diciembre la planta de margarina Dánica en Llavallol, dejando un impacto profundo en los trabajadores y en la comunidad local, en un escenario de recesión y depresión en las economías familiares.
Cuáles son las causas del cierre
Según explicó Agustín Amicone, titular de la Unión de Trabajadores de la Industria del Calzado (Uticra), el cierre de DASS se debe a una crisis generalizada en el sector provocada por el aumento de las importaciones y la disminución del consumo interno.
La apertura comercial en Argentina, señaló Amicone, llevó a que empresas como Adidas, principal cliente de DASS, optaran por importar calzado a menor costo en lugar de producirlo localmente. Esto debilitó la cadena de producción nacional y precipitó el cierre de la planta.